COLOMBO – El estudio del Banco Mundial «La Mujer, la Empresa y el Derecho» ha documentado una persistente brecha de género previsional en numerosos países, ricos y pobres por igual. Dicha divergencia se debe en parte a disparidades jurídicas con una base de género, por ejemplo edades jubilatorias diferentes y la falta de acreditación de los períodos de cuidado infantil. Como las mujeres tienen vidas laborales más breves, ganan menos y tienen una mayor expectativa de vida que los hombres, es común que cobren menos dinero al jubilarse y tengan que hacerlo durar más tiempo.
COLOMBO – El estudio del Banco Mundial «La Mujer, la Empresa y el Derecho» ha documentado una persistente brecha de género previsional en numerosos países, ricos y pobres por igual. Dicha divergencia se debe en parte a disparidades jurídicas con una base de género, por ejemplo edades jubilatorias diferentes y la falta de acreditación de los períodos de cuidado infantil. Como las mujeres tienen vidas laborales más breves, ganan menos y tienen una mayor expectativa de vida que los hombres, es común que cobren menos dinero al jubilarse y tengan que hacerlo durar más tiempo.