NUEVA YORK – Muchos gerentes están tratando el desplazamiento al trabajo desde casa, situación inducida por la pandemia de este año, como si fuera teletrabajo estándar. Pero no lo es, y operar bajo el supuesto de que sí lo es, puede dañar, en última instancia, la moral de los empleados. Si bien a los trabajadores de oficina normalmente les está yendo comparativamente mejor que a los trabajadores esenciales durante la pandemia, el abrupto cambio al trabajo a distancia fue inquietante y sus efectos no deben pasarse por alto.
NUEVA YORK – Muchos gerentes están tratando el desplazamiento al trabajo desde casa, situación inducida por la pandemia de este año, como si fuera teletrabajo estándar. Pero no lo es, y operar bajo el supuesto de que sí lo es, puede dañar, en última instancia, la moral de los empleados. Si bien a los trabajadores de oficina normalmente les está yendo comparativamente mejor que a los trabajadores esenciales durante la pandemia, el abrupto cambio al trabajo a distancia fue inquietante y sus efectos no deben pasarse por alto.