CAMBRIDGE – El mundo anglo-norteamericano, que en algún momento fue un faro del “estado de derecho”, se está transformando en un caos constitucional. En Estados Unidos, la administración del presidente Donald Trump está poniendo a prueba la resiliencia del sistema de controles y contrapesos hasta el punto de ruptura. En la Gran Bretaña del Brexit, mientras tanto, el debate sobre la pertenencia a la Unión Europea amenaza con desgarrar al país o, peor aún, desintegrarlo en pedazos.
CAMBRIDGE – El mundo anglo-norteamericano, que en algún momento fue un faro del “estado de derecho”, se está transformando en un caos constitucional. En Estados Unidos, la administración del presidente Donald Trump está poniendo a prueba la resiliencia del sistema de controles y contrapesos hasta el punto de ruptura. En la Gran Bretaña del Brexit, mientras tanto, el debate sobre la pertenencia a la Unión Europea amenaza con desgarrar al país o, peor aún, desintegrarlo en pedazos.