A pesar de su retórica belicosa, George W. Bush gustaría mucho de evitar tener que optar entre ordenar ataques aéreos contra emplazamientos nucleares iraníes o aceptar un Irán con poder nuclear. Por el momento, los funcionarios de su gobierno esperan que las sanciones “selectivas”, que se dirigen directamente a los líderes iraníes, permitirán llegar a un arreglo. La reciente decisión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de intensificar las sanciones actuales sobre Irán, prohibiendo tratos con 15 personas y 13 organizaciones, se orienta precisamente a eso. Sin embargo, si bien algunos miembros del gobierno de EE.UU. argumentan que sanciones similares influyeron para que Corea del Norte cediera con respecto a su programa nuclear, hay varias razones por las que es poco probable que la misma estrategia funcione en el caso de Irán.
A pesar de su retórica belicosa, George W. Bush gustaría mucho de evitar tener que optar entre ordenar ataques aéreos contra emplazamientos nucleares iraníes o aceptar un Irán con poder nuclear. Por el momento, los funcionarios de su gobierno esperan que las sanciones “selectivas”, que se dirigen directamente a los líderes iraníes, permitirán llegar a un arreglo. La reciente decisión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de intensificar las sanciones actuales sobre Irán, prohibiendo tratos con 15 personas y 13 organizaciones, se orienta precisamente a eso. Sin embargo, si bien algunos miembros del gobierno de EE.UU. argumentan que sanciones similares influyeron para que Corea del Norte cediera con respecto a su programa nuclear, hay varias razones por las que es poco probable que la misma estrategia funcione en el caso de Irán.