Quizá la tendencia más extraordinaria en la macroeconomía global en los últimos veinte años haya sido la sorprendente caída en la volatilidad del crecimiento de la producción. En Estados Unidos, por caso, la volatilidad de la producción trimestral cayó en más del 50% desde mediados de los años 80. Obviamente, la moderación en los movimientos de producción no ocurrió en todas partes al mismo tiempo. La volatilidad en Asia comenzó a caer recién después de la crisis financiera de fines de los años 90. En Japón y América latina, la volatilidad cayó de manera significativa recién en esta década. Pero, a esta altura, la caída se ha vuelto prácticamente universal, con implicancias importantes para los mercados de activos globales.
Quizá la tendencia más extraordinaria en la macroeconomía global en los últimos veinte años haya sido la sorprendente caída en la volatilidad del crecimiento de la producción. En Estados Unidos, por caso, la volatilidad de la producción trimestral cayó en más del 50% desde mediados de los años 80. Obviamente, la moderación en los movimientos de producción no ocurrió en todas partes al mismo tiempo. La volatilidad en Asia comenzó a caer recién después de la crisis financiera de fines de los años 90. En Japón y América latina, la volatilidad cayó de manera significativa recién en esta década. Pero, a esta altura, la caída se ha vuelto prácticamente universal, con implicancias importantes para los mercados de activos globales.