El retorno a la prosperidad del sudeste asiático desde la crisis financiera de 1997 generó un despliegue de armas nuevas a nivel regional. La mayoría de los países del sudeste asiático, de hecho, hoy están muy ocupados modernizando sus fuerzas armadas. Hasta el momento, la mayoría lo hizo sin comprometer su autonomía en cuestiones de seguridad. Pero, en un momento en que el fortalecimiento militar de China causa nerviosismo en todas partes, muchos gobiernos de la región están empezando a trabajar con potencias externas.
El retorno a la prosperidad del sudeste asiático desde la crisis financiera de 1997 generó un despliegue de armas nuevas a nivel regional. La mayoría de los países del sudeste asiático, de hecho, hoy están muy ocupados modernizando sus fuerzas armadas. Hasta el momento, la mayoría lo hizo sin comprometer su autonomía en cuestiones de seguridad. Pero, en un momento en que el fortalecimiento militar de China causa nerviosismo en todas partes, muchos gobiernos de la región están empezando a trabajar con potencias externas.