WASHINGTON, DC – Más que cualquier otro suceso de la primavera árabe, el caos en Siria se ha traducido en graves dificultades para los responsables del diseño de políticas occidentales. Así como Siria se compone de una sociedad más compleja respecto de los otros países árabes, que actualmente están sumidos en una transición política, del mismo modo sus relaciones externas son más complicadas. En consecuencia, todo intento decisivo de intervenir militarmente sería no solo difícil sino extremadamente riesgoso.
WASHINGTON, DC – Más que cualquier otro suceso de la primavera árabe, el caos en Siria se ha traducido en graves dificultades para los responsables del diseño de políticas occidentales. Así como Siria se compone de una sociedad más compleja respecto de los otros países árabes, que actualmente están sumidos en una transición política, del mismo modo sus relaciones externas son más complicadas. En consecuencia, todo intento decisivo de intervenir militarmente sería no solo difícil sino extremadamente riesgoso.