SEATTLE – El mes pasado, un ex ministro de gabinete zimbabuense fue arrestado por vender ilegalmente terrenos rurales públicos. Unos cuantos días antes, una corte malaya sentenció a cárcel al ex presidente de la estatal agencia anticorrupción de desarrollo de tierras. Y en enero, el gobierno estonio colapsó entre acusaciones de tratos inmobiliarios corruptos. Todos estos acontecimientos recientes subrayan la creciente pero descuidada amenaza de la corrupción relacionada con los registros de propiedad de bienes raíces.
SEATTLE – El mes pasado, un ex ministro de gabinete zimbabuense fue arrestado por vender ilegalmente terrenos rurales públicos. Unos cuantos días antes, una corte malaya sentenció a cárcel al ex presidente de la estatal agencia anticorrupción de desarrollo de tierras. Y en enero, el gobierno estonio colapsó entre acusaciones de tratos inmobiliarios corruptos. Todos estos acontecimientos recientes subrayan la creciente pero descuidada amenaza de la corrupción relacionada con los registros de propiedad de bienes raíces.