JAKARTA/MANILA – En noviembre pasado, los líderes del planeta se reunieron en Glasgow para trazar una ruta que mitigue los peores efectos del cambio climático. Pero, aunque no hay dudas de que la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) fue un momento histórico, la mayoría de los países recién comienzan a cumplir sus nuevos objetivos de reducción de las emisiones de dióxido de carbono.
Por eso destacó el anuncio del Banco Asiático de Desarrollo (ADB) y los gobiernos indonesio y filipino en la COP26. Al lanzar nuestra iniciativa para un Mecanismo de Transición Energética (ETM, por sus siglas en inglés), no estábamos haciendo una promesa vaga de lograr un objetivo distante. En lugar de ello, formulamos en conjunto un plan concreto para alcanzar una energía justa, asequible, escalable y equitativa que sirva de ayuda para que los países asiáticos retiren o reacondicionen la mitad de sus plantas energéticas a carbón y eleven su nivel de dependencia en energías limpias. El ETM es un plan climático transformador con el potencial de convertirse en el mayor programa de reducción de CO2 del mundo.
El ETM tomará un enfoque financiero de retirar o reacondicionar plantas energéticas a carbón antes de lo programado, al tiempo que eleva las inversiones en energía limpia. Esta doble estrategia beneficiará a comunidades, inversionistas, economías regionales y al medio ambiente.
Aunque en muchos países los costes de la energía limpia están disminuyendo rápidamente, muchas plantas eléctricas a carbón funcionan en base a contratos de adquisición segura y de largo plazo. Y, en Asia, estos centros son recientes: la región alberga el 90% del total de las plantas de este tipo de menos de 20 años. Sin una intervención de las autoridades, es improbable que sean retiradas en el corto plazo. Cada año que siguen activas emitirán más CO2 y desplazarán la demanda de energía limpia y renovable.
El ETM utilizará una combinación de fondos públicos, privados y filantrópicos para hacer que el mercado se incline en la dirección adecuada, retirando el carbón antes y creando demanda para una energía limpia. Estimamos que este modelo, si se amplía en apenas tres países del sudeste asiático –Indonesia, las Filipinas y Vietnam- podría retirar hasta el 50% de sus plantas energéticas a carbón entre los próximos 10 a 15 años. Estimamos que eso reduciría las emisiones anuales de CO2 en unos 200 millones de toneladas, el equivalente a retirar 61 millones de vehículos de pasajeros de las carreteras.
Reconocemos que el paso a un futuro de bajas emisiones de carbono y energía limpia debe funcionar para todos, por lo que pondremos énfasis en una transición energética justa y equitativa al ofrecer asistencia técnica y la readaptación de trabajadores, en particular mujeres empleadas en el sector energético. Estamos colaborando con organizaciones sin fines de lucro, organizaciones cívicas y otros actores para asegurarnos de que ninguna comunidad ni trabajador quede a la zaga en la transición verde.
At a time when democracy is under threat, there is an urgent need for incisive, informed analysis of the issues and questions driving the news – just what PS has always provided. Subscribe now and save $50 on a new subscription.
Subscribe Now
El enfoque del ETM es único y no tiene precedentes en la región del Asia-Pacífico. El plan hace uso de una autoridad convocante –en este caso, el ADB- para reunir inversionistas privados, gobiernos y representantes de la sociedad civil y sostener una relación de colaboración mutuamente benéfica basado en la transparencia y la confianza.
Puesto que se trata de una iniciativa regional, debe funcionar para personas y economías locales, lo que significa asegurar que la electricidad se mantenga a precios asequibles. Haciendo de las inversiones externas un catalizador del desarrollo, el ETM elevará la escala de proyectos de energía limpia sin requerir nuevos subsidios estatales. Así, se sumará a las iniciativas que nuestros gobiernos hay estén impulsando, con lo que ayudará a acelerar la transición regional a las energías limpias.
Por ejemplo, las Filipinas habían anunciado previamente una moratoria a nuevas plantas energéticas a carbón, e Indonesia apunta a ir eliminándolas gradualmente a medida que busca alcanzar la carbononeutralidad para 2060. Y si bien ha habido muchos llamados a que mecanismos de mercado aborden las transiciones a una producción de energía más limpia, la mayoría no han funcionado, a menudo por no dar adecuada cuenta de los recursos y los intereses de las comunidades afectadas. El ETM solucionará ese problema.
Al reducir de manera significativa la vida útil de las plantas energéticas a carbón, el ETM destrabará nuevas inversiones para energía sostenible y renovable. Eso haría de Indonesia y las Filipinas destinos todavía más atractivos para proyectos energéticos limpios y de vanguardia y daría a las comunidades la seguridad energética que necesitan.
En último término, la batalla contra el cambio climático se ganará o perderá en la región del Asia Pacífico. Confiamos en que el modelo ETM no solo ayudará a solucionar los propios desafíos de la región, sino que se podrá elevar de escala y exportar a todo el planeta, empoderando a los países en desarrollo para que hagan la transición desde los combustibles fósiles a la energía renovable sin sacrificar otros objetivos de desarrollo.
El crecimiento de las economías y la población de nuestra región la convierten en indispensable en la respuesta a la crisis climática mundial. A través del ETM, apuntamos a demostrar cómo los países pueden concertarse para aumentar las inversiones en energía limpia y reducir las emisiones. Únicamente trabajando juntos lograremos el objetivo de cero emisiones netas en el Sudeste asiático –y otras zonas del planeta- de manera más rápida y justa.
To have unlimited access to our content including in-depth commentaries, book reviews, exclusive interviews, PS OnPoint and PS The Big Picture, please subscribe
Even as South Korea was plunged into political turmoil following the president’s short-lived declaration of martial law, financial markets have remained calm. But the country still has months of political uncertainty ahead, leaving it in a weak position to respond to US policy changes when President-elect Donald Trump takes office.
argues that while markets shrugged off the recent turmoil, the episode could have long-lasting consequences.
Dominant intellectual frameworks persist until their limitations in describing reality become undeniable, paving the way for a new paradigm. The idea that the world can and will replace fossil fuels with renewables has reached that point.
argue that replacing fossil fuels with renewables is an idea that has exhausted its utility.
Log in/Register
Please log in or register to continue. Registration is free and requires only your email address.
JAKARTA/MANILA – En noviembre pasado, los líderes del planeta se reunieron en Glasgow para trazar una ruta que mitigue los peores efectos del cambio climático. Pero, aunque no hay dudas de que la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) fue un momento histórico, la mayoría de los países recién comienzan a cumplir sus nuevos objetivos de reducción de las emisiones de dióxido de carbono.
Por eso destacó el anuncio del Banco Asiático de Desarrollo (ADB) y los gobiernos indonesio y filipino en la COP26. Al lanzar nuestra iniciativa para un Mecanismo de Transición Energética (ETM, por sus siglas en inglés), no estábamos haciendo una promesa vaga de lograr un objetivo distante. En lugar de ello, formulamos en conjunto un plan concreto para alcanzar una energía justa, asequible, escalable y equitativa que sirva de ayuda para que los países asiáticos retiren o reacondicionen la mitad de sus plantas energéticas a carbón y eleven su nivel de dependencia en energías limpias. El ETM es un plan climático transformador con el potencial de convertirse en el mayor programa de reducción de CO2 del mundo.
El ETM tomará un enfoque financiero de retirar o reacondicionar plantas energéticas a carbón antes de lo programado, al tiempo que eleva las inversiones en energía limpia. Esta doble estrategia beneficiará a comunidades, inversionistas, economías regionales y al medio ambiente.
Aunque en muchos países los costes de la energía limpia están disminuyendo rápidamente, muchas plantas eléctricas a carbón funcionan en base a contratos de adquisición segura y de largo plazo. Y, en Asia, estos centros son recientes: la región alberga el 90% del total de las plantas de este tipo de menos de 20 años. Sin una intervención de las autoridades, es improbable que sean retiradas en el corto plazo. Cada año que siguen activas emitirán más CO2 y desplazarán la demanda de energía limpia y renovable.
El ETM utilizará una combinación de fondos públicos, privados y filantrópicos para hacer que el mercado se incline en la dirección adecuada, retirando el carbón antes y creando demanda para una energía limpia. Estimamos que este modelo, si se amplía en apenas tres países del sudeste asiático –Indonesia, las Filipinas y Vietnam- podría retirar hasta el 50% de sus plantas energéticas a carbón entre los próximos 10 a 15 años. Estimamos que eso reduciría las emisiones anuales de CO2 en unos 200 millones de toneladas, el equivalente a retirar 61 millones de vehículos de pasajeros de las carreteras.
Reconocemos que el paso a un futuro de bajas emisiones de carbono y energía limpia debe funcionar para todos, por lo que pondremos énfasis en una transición energética justa y equitativa al ofrecer asistencia técnica y la readaptación de trabajadores, en particular mujeres empleadas en el sector energético. Estamos colaborando con organizaciones sin fines de lucro, organizaciones cívicas y otros actores para asegurarnos de que ninguna comunidad ni trabajador quede a la zaga en la transición verde.
HOLIDAY SALE: PS for less than $0.7 per week
At a time when democracy is under threat, there is an urgent need for incisive, informed analysis of the issues and questions driving the news – just what PS has always provided. Subscribe now and save $50 on a new subscription.
Subscribe Now
El enfoque del ETM es único y no tiene precedentes en la región del Asia-Pacífico. El plan hace uso de una autoridad convocante –en este caso, el ADB- para reunir inversionistas privados, gobiernos y representantes de la sociedad civil y sostener una relación de colaboración mutuamente benéfica basado en la transparencia y la confianza.
Puesto que se trata de una iniciativa regional, debe funcionar para personas y economías locales, lo que significa asegurar que la electricidad se mantenga a precios asequibles. Haciendo de las inversiones externas un catalizador del desarrollo, el ETM elevará la escala de proyectos de energía limpia sin requerir nuevos subsidios estatales. Así, se sumará a las iniciativas que nuestros gobiernos hay estén impulsando, con lo que ayudará a acelerar la transición regional a las energías limpias.
Por ejemplo, las Filipinas habían anunciado previamente una moratoria a nuevas plantas energéticas a carbón, e Indonesia apunta a ir eliminándolas gradualmente a medida que busca alcanzar la carbononeutralidad para 2060. Y si bien ha habido muchos llamados a que mecanismos de mercado aborden las transiciones a una producción de energía más limpia, la mayoría no han funcionado, a menudo por no dar adecuada cuenta de los recursos y los intereses de las comunidades afectadas. El ETM solucionará ese problema.
Al reducir de manera significativa la vida útil de las plantas energéticas a carbón, el ETM destrabará nuevas inversiones para energía sostenible y renovable. Eso haría de Indonesia y las Filipinas destinos todavía más atractivos para proyectos energéticos limpios y de vanguardia y daría a las comunidades la seguridad energética que necesitan.
En último término, la batalla contra el cambio climático se ganará o perderá en la región del Asia Pacífico. Confiamos en que el modelo ETM no solo ayudará a solucionar los propios desafíos de la región, sino que se podrá elevar de escala y exportar a todo el planeta, empoderando a los países en desarrollo para que hagan la transición desde los combustibles fósiles a la energía renovable sin sacrificar otros objetivos de desarrollo.
El crecimiento de las economías y la población de nuestra región la convierten en indispensable en la respuesta a la crisis climática mundial. A través del ETM, apuntamos a demostrar cómo los países pueden concertarse para aumentar las inversiones en energía limpia y reducir las emisiones. Únicamente trabajando juntos lograremos el objetivo de cero emisiones netas en el Sudeste asiático –y otras zonas del planeta- de manera más rápida y justa.
Traducido del inglés por David Meléndez Tormen