TOKIO – El entusiasmo con el que Japón comenzó a rearmarse sorprendió a sus aliados y socios internacionales. El mes pasado, el primer ministro japonés Fumio Kishida dio a conocer planes detallados para duplicar el gasto en defensa durante los próximos cinco años, lo que no deja dudas sobre la determinación del país para expandir sus capacidades militares y disuadir a China de su ambición expansionista.
TOKIO – El entusiasmo con el que Japón comenzó a rearmarse sorprendió a sus aliados y socios internacionales. El mes pasado, el primer ministro japonés Fumio Kishida dio a conocer planes detallados para duplicar el gasto en defensa durante los próximos cinco años, lo que no deja dudas sobre la determinación del país para expandir sus capacidades militares y disuadir a China de su ambición expansionista.