Washington D. C. – Cuando Edmundo —un reciclador informal peruano— enfermó de COVID-19, tuvo que pedir un crédito bancario para pagar la visita a la clínica. Muchos de sus colegas también se contagiaron y no tuvieron más remedio que endeudarse: desesperados, buscaron créditos, agotaron sus ahorros, y vendieron su tierra y posesiones para pagar la atención médica y los medicamentos recetados.
Washington D. C. – Cuando Edmundo —un reciclador informal peruano— enfermó de COVID-19, tuvo que pedir un crédito bancario para pagar la visita a la clínica. Muchos de sus colegas también se contagiaron y no tuvieron más remedio que endeudarse: desesperados, buscaron créditos, agotaron sus ahorros, y vendieron su tierra y posesiones para pagar la atención médica y los medicamentos recetados.