WASHINGTON, DC – El oro es escaso. Más del 99,9% de la corteza terrestre está compuesto por óxidos de silicona, aluminio, calcio, magnesio, sodio, hierro, potasio, titanio y fósforo, así que a través de la historia cada descubrimiento de oro ha causado gran revuelo. A pesar de las graves consecuencias ambientales que conlleva la explotación del oro - entre ellas la contaminación con mercurio y cianuro y la devastación ambiental - el hombre no ha cesado en su búsqueda y es dudoso que lo haga.
WASHINGTON, DC – El oro es escaso. Más del 99,9% de la corteza terrestre está compuesto por óxidos de silicona, aluminio, calcio, magnesio, sodio, hierro, potasio, titanio y fósforo, así que a través de la historia cada descubrimiento de oro ha causado gran revuelo. A pesar de las graves consecuencias ambientales que conlleva la explotación del oro - entre ellas la contaminación con mercurio y cianuro y la devastación ambiental - el hombre no ha cesado en su búsqueda y es dudoso que lo haga.