BERLÍN – El voto del Brexit del Reino Unido, la derrota en el reciente referendo del primer ministro italiano Matteo Renzi y su subsiguiente renuncia, y la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos han creado un vacío de poder en Occidente, y en Europa. En un momento en que Europa necesita tomar importantes decisiones colectivas en materia de economía y política exterior, las cuestiones domésticas preocupan a los estados miembro más grandes de la Unión Europea como Francia, el Reino Unido, España e Italia. En consecuencia, existe una creciente presión para que la canciller alemana, Angela Merkel, y su gobierno den un paso adelante y lideren.
BERLÍN – El voto del Brexit del Reino Unido, la derrota en el reciente referendo del primer ministro italiano Matteo Renzi y su subsiguiente renuncia, y la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos han creado un vacío de poder en Occidente, y en Europa. En un momento en que Europa necesita tomar importantes decisiones colectivas en materia de economía y política exterior, las cuestiones domésticas preocupan a los estados miembro más grandes de la Unión Europea como Francia, el Reino Unido, España e Italia. En consecuencia, existe una creciente presión para que la canciller alemana, Angela Merkel, y su gobierno den un paso adelante y lideren.