CAMBRIDGE – Cada diciembre es una tradición hacer un balance del año que termina y reflexionar sobre lo que nos puede deparar el destino. Esto es cierto a nivel personal: en mi familia, solemos hacerlo alrededor de la mesa. Pero también lo es a nivel más general, ya que esta época del año invita a examinar la intersección de la economía, la política nacional y la geopolítica mundial.
CAMBRIDGE – Cada diciembre es una tradición hacer un balance del año que termina y reflexionar sobre lo que nos puede deparar el destino. Esto es cierto a nivel personal: en mi familia, solemos hacerlo alrededor de la mesa. Pero también lo es a nivel más general, ya que esta época del año invita a examinar la intersección de la economía, la política nacional y la geopolítica mundial.