CAMBRIDGE – Estados Unidos puede estar encaminado a una recesión en 2013. Incluso si el país evita caer en el "abismo fiscal", un acuerdo político muy mal diseñado que recorta el déficit demasiado rápido podría empujar a una economía, que ya es débil, a una recesión. Sin embargo, una implementación gradual en etapas de un tope general a las deducciones y eximiciones de impuestos (los llamados gastos impositivos), combinada con una reforma del gasto en subsidios, podría lograr la consolidación fiscal a largo plazo que Estados Unidos necesita sin correr el riesgo de entrar en una nueva recesión.
CAMBRIDGE – Estados Unidos puede estar encaminado a una recesión en 2013. Incluso si el país evita caer en el "abismo fiscal", un acuerdo político muy mal diseñado que recorta el déficit demasiado rápido podría empujar a una economía, que ya es débil, a una recesión. Sin embargo, una implementación gradual en etapas de un tope general a las deducciones y eximiciones de impuestos (los llamados gastos impositivos), combinada con una reforma del gasto en subsidios, podría lograr la consolidación fiscal a largo plazo que Estados Unidos necesita sin correr el riesgo de entrar en una nueva recesión.