NUEVA YORK – El punto más memorable de 2012 para mi fue cuando, durante un momento difícil, recibí un mensaje de aliento de un bombero. Su comentario fue que mis ideas sobre el riesgo de evento catastrófico le parecían extremadamente fáciles de entender. Su pregunta fue: ¿cómo es que los gurúes del riesgo, los académicos y los modeladores financieros no lo entienden?
NUEVA YORK – El punto más memorable de 2012 para mi fue cuando, durante un momento difícil, recibí un mensaje de aliento de un bombero. Su comentario fue que mis ideas sobre el riesgo de evento catastrófico le parecían extremadamente fáciles de entender. Su pregunta fue: ¿cómo es que los gurúes del riesgo, los académicos y los modeladores financieros no lo entienden?