LONDRES – En el umbral del nuevo año, se enciende nuevamente un debate entre economistas que tiene ya décadas de duración: ¿ayuda o perjudica la austeridad al crecimiento económico? Hablando en términos generales, los participantes en esta polémica se dividen en dos bandos: los conservadores, que exigen un gasto público limitado y, por lo tanto, un Estado más pequeño; y los progresistas que abogan a favor de una mayor inversión en bienes y servicios públicos, como ser infraestructura, educación y atención médica.
LONDRES – En el umbral del nuevo año, se enciende nuevamente un debate entre economistas que tiene ya décadas de duración: ¿ayuda o perjudica la austeridad al crecimiento económico? Hablando en términos generales, los participantes en esta polémica se dividen en dos bandos: los conservadores, que exigen un gasto público limitado y, por lo tanto, un Estado más pequeño; y los progresistas que abogan a favor de una mayor inversión en bienes y servicios públicos, como ser infraestructura, educación y atención médica.