NUEVA YORK – La decisión del presidente electo de los Estados Unidos Joe Biden de designar a Janet Yellen como próxima secretaria del Tesoro es buena noticia para Estados Unidos y para el mundo. Estados Unidos sobrevivió cuatro años de un presidente mendaz, desprovisto de comprensión (y menos aún respeto) del Estado de Derecho y de los principios en los que se basan la democracia y la economía de mercado, desprovisto incluso de un nivel básico de decencia. Donald Trump no sólo se pasó las semanas que siguieron a la elección presidencial esparciendo mentiras sobre un fraude inexistente, sino que también convenció a una gran mayoría de su partido para que las acepte, lo que revela la fragilidad de la democracia estadounidense.
NUEVA YORK – La decisión del presidente electo de los Estados Unidos Joe Biden de designar a Janet Yellen como próxima secretaria del Tesoro es buena noticia para Estados Unidos y para el mundo. Estados Unidos sobrevivió cuatro años de un presidente mendaz, desprovisto de comprensión (y menos aún respeto) del Estado de Derecho y de los principios en los que se basan la democracia y la economía de mercado, desprovisto incluso de un nivel básico de decencia. Donald Trump no sólo se pasó las semanas que siguieron a la elección presidencial esparciendo mentiras sobre un fraude inexistente, sino que también convenció a una gran mayoría de su partido para que las acepte, lo que revela la fragilidad de la democracia estadounidense.