LONDRES/GINEBRA – Parece mentira, pero es cierto: en plena crisis de la COVID‑19, los estados miembros de la Organización Mundial de la Salud todavía se preguntan si deben aumentar, y cuánto, sus aportes financieros periódicos a la organización, cuya labor sigue salvando vidas dentro y fuera de sus fronteras.
LONDRES/GINEBRA – Parece mentira, pero es cierto: en plena crisis de la COVID‑19, los estados miembros de la Organización Mundial de la Salud todavía se preguntan si deben aumentar, y cuánto, sus aportes financieros periódicos a la organización, cuya labor sigue salvando vidas dentro y fuera de sus fronteras.