NUEVA YORK – Los mercados financieros globales en 2008 experimentaron su peor crisis desde la Gran Depresión de los años 1930. Instituciones financieras de renombre terminaron en la ruina; otras fueron compradas a precio de bagatela o sobrevivieron sólo después de importantes rescates. Los mercados accionarios globales cayeron en más del 50%; los diferenciales de las tasas de interés subieron vertiginosamente; apareció una severa crisis de liquidez y de crédito; y muchas economías de mercados emergentes se acercaron a los tumbos al Fondo Monetario Internacional en busca de ayuda.
NUEVA YORK – Los mercados financieros globales en 2008 experimentaron su peor crisis desde la Gran Depresión de los años 1930. Instituciones financieras de renombre terminaron en la ruina; otras fueron compradas a precio de bagatela o sobrevivieron sólo después de importantes rescates. Los mercados accionarios globales cayeron en más del 50%; los diferenciales de las tasas de interés subieron vertiginosamente; apareció una severa crisis de liquidez y de crédito; y muchas economías de mercados emergentes se acercaron a los tumbos al Fondo Monetario Internacional en busca de ayuda.