PARÍS – Una situación desesperada puede la inclusión, otrora impensable, de ciertos temas en el debate público. En Francia, la idea que ahora se atreve a pronunciar su nombre en público es que el país se hundirá en un malestar económico cada vez más profundo, a menos que recupere su soberanía monetaria.
PARÍS – Una situación desesperada puede la inclusión, otrora impensable, de ciertos temas en el debate público. En Francia, la idea que ahora se atreve a pronunciar su nombre en público es que el país se hundirá en un malestar económico cada vez más profundo, a menos que recupere su soberanía monetaria.