WASHINGTON DC – El ámbito económico mundial se está acidificando. En su reunión en Fukuoka, Japón, a principios del mes de junio, los ministros de finanzas del G20 y los gobernadores de los bancos centrales advirtieron que el crecimiento económico sigue siendo débil, y que los riesgos aún se inclinan a la baja. Justo unos días antes de esa reunión, el Banco Mundial redujo su pronóstico de crecimiento mundial para el año 2019 al 2,6%, (la tasa más baja en tres años) y pronosticó que el crecimiento seguirá siendo moderado durante el período 2020-2021.
WASHINGTON DC – El ámbito económico mundial se está acidificando. En su reunión en Fukuoka, Japón, a principios del mes de junio, los ministros de finanzas del G20 y los gobernadores de los bancos centrales advirtieron que el crecimiento económico sigue siendo débil, y que los riesgos aún se inclinan a la baja. Justo unos días antes de esa reunión, el Banco Mundial redujo su pronóstico de crecimiento mundial para el año 2019 al 2,6%, (la tasa más baja en tres años) y pronosticó que el crecimiento seguirá siendo moderado durante el período 2020-2021.