BOSTON – La renovada fórmula presidencial demócrata ha reenergizado al partido y eliminado la creciente ventaja en las encuestas que el expresidente estadounidense Donald Trump tenía sobre su sucesor, Joe Biden. Hay mucho que admirar en los antecedentes de Kamala Harris y Tim Walz, en sus carreras y en sus últimos discursos de campaña, que se centraron en combatir la pobreza, mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, quitarles la bandera del patriotismo a los republicanos y fortalecer la democracia. Pero incluso dejando a un lado estas virtudes, hay buenos motivos para apoyar la fórmula demócrata. Al fin y al cabo, la alternativa es Trump, quien plantea una amenaza tan seria a las instituciones estadounidenses que cualquier candidato medianamente aceptable que se presentara contra él merecería un fuerte apoyo.
BOSTON – La renovada fórmula presidencial demócrata ha reenergizado al partido y eliminado la creciente ventaja en las encuestas que el expresidente estadounidense Donald Trump tenía sobre su sucesor, Joe Biden. Hay mucho que admirar en los antecedentes de Kamala Harris y Tim Walz, en sus carreras y en sus últimos discursos de campaña, que se centraron en combatir la pobreza, mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, quitarles la bandera del patriotismo a los republicanos y fortalecer la democracia. Pero incluso dejando a un lado estas virtudes, hay buenos motivos para apoyar la fórmula demócrata. Al fin y al cabo, la alternativa es Trump, quien plantea una amenaza tan seria a las instituciones estadounidenses que cualquier candidato medianamente aceptable que se presentara contra él merecería un fuerte apoyo.