CHICAGO – El viernes 8 de enero, la presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, anunció planes de iniciarle juicio político al presidente Donald Trump (el segundo en un año) con la esperanza de destituirlo antes de que haga más daño al país. El primer intento, que empezó en diciembre de 2019 y concluyó el pasado febrero, fue inútil e imprudente, y terminó dando una ligera ventaja política a Trump. Ahora los demócratas tampoco la tendrán fácil, pero deben seguir adelante. El juicio político ofrece la posibilidad de impedir que Trump vuelva a ejercer un cargo público, y con eso es suficiente para justificar el riesgo de que no prospere.
CHICAGO – El viernes 8 de enero, la presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, anunció planes de iniciarle juicio político al presidente Donald Trump (el segundo en un año) con la esperanza de destituirlo antes de que haga más daño al país. El primer intento, que empezó en diciembre de 2019 y concluyó el pasado febrero, fue inútil e imprudente, y terminó dando una ligera ventaja política a Trump. Ahora los demócratas tampoco la tendrán fácil, pero deben seguir adelante. El juicio político ofrece la posibilidad de impedir que Trump vuelva a ejercer un cargo público, y con eso es suficiente para justificar el riesgo de que no prospere.