RIO DE JANEIRO - Desde finales del año pasado, una serie de acontecimientos positivos ha impulsado la confianza de los inversores y llevó a un marcado incremento en los activos de riesgo, partiendo por los valores globales y las materias primas. Mejoraron los datos macroeconómicos de Estados Unidos y las empresas de primera línea de las economías avanzadas han seguido siendo muy rentables. China y los mercados emergentes se desaceleraron moderadamente, y se redujo el riesgo de una suspensión de pagos caótica y/o la salida de algunos miembros de la eurozona.
RIO DE JANEIRO - Desde finales del año pasado, una serie de acontecimientos positivos ha impulsado la confianza de los inversores y llevó a un marcado incremento en los activos de riesgo, partiendo por los valores globales y las materias primas. Mejoraron los datos macroeconómicos de Estados Unidos y las empresas de primera línea de las economías avanzadas han seguido siendo muy rentables. China y los mercados emergentes se desaceleraron moderadamente, y se redujo el riesgo de una suspensión de pagos caótica y/o la salida de algunos miembros de la eurozona.