LONDRES – El papel que jugó el hijo del líder libio Muammar al-Qaddafi, Saif al-Islam, a la hora de obtener la liberación del acusado del atentado de Lockerbie Abdelbaset Ali al-Megrahi, y la visita estatal a Washington del presidente egipcio, Hosni Mubarak, acompañado de su hijo, Gamal, sugieren que hay sucesiones dinásticas en marcha en ambos países.
LONDRES – El papel que jugó el hijo del líder libio Muammar al-Qaddafi, Saif al-Islam, a la hora de obtener la liberación del acusado del atentado de Lockerbie Abdelbaset Ali al-Megrahi, y la visita estatal a Washington del presidente egipcio, Hosni Mubarak, acompañado de su hijo, Gamal, sugieren que hay sucesiones dinásticas en marcha en ambos países.