Las elecciones parlamentarias y presidenciales de Polonia que se han celebrado este mes han atestiguado la muerte de un partido de izquierda poscomunista que dominaba el país en gran medida desde 1995, pero la desaparición de la izquierda no significa que la derecha tenga un programa económico coherente, pues la coalición victoriosa del partido Ley y Justicia (PiS) y de la Plataforma Cívica (PO) está dividida entre los instintos liberal (PO) y populista (PiS).
Las elecciones parlamentarias y presidenciales de Polonia que se han celebrado este mes han atestiguado la muerte de un partido de izquierda poscomunista que dominaba el país en gran medida desde 1995, pero la desaparición de la izquierda no significa que la derecha tenga un programa económico coherente, pues la coalición victoriosa del partido Ley y Justicia (PiS) y de la Plataforma Cívica (PO) está dividida entre los instintos liberal (PO) y populista (PiS).