PARÍS – La caída del Imperio Romano fue consecuencia de una combinación de un exceso estratégico y una delegación excesiva de los cometidos de seguridad a unos recién llegados. Sin pretender hacer comparaciones indebidas, la cuestión que se plantea actualmente a los Estados Unidos es si pueden seguir siendo la potencia principal del mundo y al tiempo delegar en otros o en instrumentos técnicos la tarea de proteger su influencia mundial.
PARÍS – La caída del Imperio Romano fue consecuencia de una combinación de un exceso estratégico y una delegación excesiva de los cometidos de seguridad a unos recién llegados. Sin pretender hacer comparaciones indebidas, la cuestión que se plantea actualmente a los Estados Unidos es si pueden seguir siendo la potencia principal del mundo y al tiempo delegar en otros o en instrumentos técnicos la tarea de proteger su influencia mundial.