El segundo discurso de toma de posesión del Presidente Bush planteó una visión ambiciosa del papel de los Estados Unidos en la promoción de la causa de la libertad en todo el mundo, lo que alimenta las especulaciones sobre el curso que tomará la política exterior del país en los próximos cuatro años. Por ello, las ideas expresadas en el discurso de Bush merecen una reflexión seria.
El segundo discurso de toma de posesión del Presidente Bush planteó una visión ambiciosa del papel de los Estados Unidos en la promoción de la causa de la libertad en todo el mundo, lo que alimenta las especulaciones sobre el curso que tomará la política exterior del país en los próximos cuatro años. Por ello, las ideas expresadas en el discurso de Bush merecen una reflexión seria.