LONDRES – Mientras Dmitri Medvedev espera su estreno en el cargo el 7 de mayo, Occidente está examinando cada una de sus palabras, ansioso de la más ligera señal de que el nuevo presidente de Rusia será más ampquot;razonableampquot; y fácil de tratar que Vladimir Putin, el hombre que hizo que resultara electo.
LONDRES – Mientras Dmitri Medvedev espera su estreno en el cargo el 7 de mayo, Occidente está examinando cada una de sus palabras, ansioso de la más ligera señal de que el nuevo presidente de Rusia será más ampquot;razonableampquot; y fácil de tratar que Vladimir Putin, el hombre que hizo que resultara electo.