La designación por parte del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de Bernard Kouchner como ministro de Relaciones Exteriores de Francia fue una estocada política brillante. Tras haber derrotado a su rival socialista, Ségolène Royal, Sarkozy decidió agravar la crisis de los socialistas nombrando para su gobierno a varios políticos durante mucho tiempo asociados con el centroizquierda. Sarkozy persuadió a dos mujeres de contextos inmigrantes, Rama Yade y la conocida activista feminista Fadela Amara, de aceptar puestos en el subgabinete, mientras que Kouchner ha sido la figura política más popular en Francia en los últimos años.
La designación por parte del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de Bernard Kouchner como ministro de Relaciones Exteriores de Francia fue una estocada política brillante. Tras haber derrotado a su rival socialista, Ségolène Royal, Sarkozy decidió agravar la crisis de los socialistas nombrando para su gobierno a varios políticos durante mucho tiempo asociados con el centroizquierda. Sarkozy persuadió a dos mujeres de contextos inmigrantes, Rama Yade y la conocida activista feminista Fadela Amara, de aceptar puestos en el subgabinete, mientras que Kouchner ha sido la figura política más popular en Francia en los últimos años.