CLAREMONT, CALIFORNIA – Una pregunta que se debería haber planteado acerca de la transición de la cúpula del Partido Comunista Chino, que acaba de realizarse, es si este elaborado ejercicio de coreografía podría haberse equiparado a reordenar las sillas de la cubierta del Titanic. A fin de cuentas, es posible que la instalación de nuevos dirigentes resulte poco importante si el fin del régimen del PCCh resulta tan previsible como probable.
CLAREMONT, CALIFORNIA – Una pregunta que se debería haber planteado acerca de la transición de la cúpula del Partido Comunista Chino, que acaba de realizarse, es si este elaborado ejercicio de coreografía podría haberse equiparado a reordenar las sillas de la cubierta del Titanic. A fin de cuentas, es posible que la instalación de nuevos dirigentes resulte poco importante si el fin del régimen del PCCh resulta tan previsible como probable.