BELGRADO: Los sondeos de opinión en Serbia muestran que la gran mayoría de la población cree que el Tribunal Criminal Internacional para la ex-Yugoslavia es un instrumento político para golpear a los serbios. Por ello, se oponen a la extradición de los acusados –incluyendo al ex-presidente Milosevic—al Tribunal de la Haya. Cuando la fiscal en jefe del Tribunal, Carla del Ponte, llegue a Belgrado este martes, la bienvenida no será cálida.
BELGRADO: Los sondeos de opinión en Serbia muestran que la gran mayoría de la población cree que el Tribunal Criminal Internacional para la ex-Yugoslavia es un instrumento político para golpear a los serbios. Por ello, se oponen a la extradición de los acusados –incluyendo al ex-presidente Milosevic—al Tribunal de la Haya. Cuando la fiscal en jefe del Tribunal, Carla del Ponte, llegue a Belgrado este martes, la bienvenida no será cálida.