A principios de los años noventa, funcionarios estadounidenses como yo que estábamos haciendo previsiones de largo plazo para la administración Clinton advertíamos que sería imprudente pronosticar una tasa de crecimiento promedio de más del 2.5% anual -y que el crecimiento real podría resultar aún menor. En retrospectiva, fue una década durante la cual la economía de Estados Unidos creció a una tasa promedio anual de 3.4%
A principios de los años noventa, funcionarios estadounidenses como yo que estábamos haciendo previsiones de largo plazo para la administración Clinton advertíamos que sería imprudente pronosticar una tasa de crecimiento promedio de más del 2.5% anual -y que el crecimiento real podría resultar aún menor. En retrospectiva, fue una década durante la cual la economía de Estados Unidos creció a una tasa promedio anual de 3.4%