El retiro del británico Paddy Ashdown como candidato al puesto de enviado de Naciones Unidas a Afganistán significa que la comunidad internacional todavía tiene camino que recorrer antes de que pueda hablar con una sola voz en ese país. Esa voz unificada es necesaria, puesto que seis años de guerra y la mayor operación militar en la historia de la OTAN no han logrado someter a la insurgencia afgana, lo que hace que el gobierno cada vez más corrupto del Presidente Hamid Karzai siga dependiendo de la permanencia de las fuerzas internacionales.
El retiro del británico Paddy Ashdown como candidato al puesto de enviado de Naciones Unidas a Afganistán significa que la comunidad internacional todavía tiene camino que recorrer antes de que pueda hablar con una sola voz en ese país. Esa voz unificada es necesaria, puesto que seis años de guerra y la mayor operación militar en la historia de la OTAN no han logrado someter a la insurgencia afgana, lo que hace que el gobierno cada vez más corrupto del Presidente Hamid Karzai siga dependiendo de la permanencia de las fuerzas internacionales.