Bélgica corre peligro de desmoronarse. Durante más de seis meses, el país ha sido incapaz de formar un gobierno que pueda unir a los valones de habla francesa (32%) y a los flamencos de habla holandesa (58%). El monarca belga, Alberto II, intenta desesperadamente impedir que sus súbditos desguacen el estado.
Bélgica corre peligro de desmoronarse. Durante más de seis meses, el país ha sido incapaz de formar un gobierno que pueda unir a los valones de habla francesa (32%) y a los flamencos de habla holandesa (58%). El monarca belga, Alberto II, intenta desesperadamente impedir que sus súbditos desguacen el estado.