Las elecciones en países que no han conocido la democracia nunca son hermosas, como lo demuestran los comicios recientes en Afganistán y como probablemente será cualquier elección en Iraq. Pero las fallas electorales no siempre describen todo el cuadro.
Las elecciones en países que no han conocido la democracia nunca son hermosas, como lo demuestran los comicios recientes en Afganistán y como probablemente será cualquier elección en Iraq. Pero las fallas electorales no siempre describen todo el cuadro.