CAMBRIDGE – Los mercados rebosan con señales de “brotes verdes” en la economía mundial. Un número cada vez mayor de inversores ven llegar un fuerte rebote, primero en China, luego en los Estados Unidos, después en Europa y, por último, en el resto del mundo. Ni siquiera los horribles datos de los dos últimos trimestres parecen desalentar a quienes abrigan esa idea optimista. Cuanto más profundo sea el desplome, mayor será el rebote, dicen algunos analistas.
CAMBRIDGE – Los mercados rebosan con señales de “brotes verdes” en la economía mundial. Un número cada vez mayor de inversores ven llegar un fuerte rebote, primero en China, luego en los Estados Unidos, después en Europa y, por último, en el resto del mundo. Ni siquiera los horribles datos de los dos últimos trimestres parecen desalentar a quienes abrigan esa idea optimista. Cuanto más profundo sea el desplome, mayor será el rebote, dicen algunos analistas.