CHICAGO – En momentos que la economía global todavía se debe recuperar de la crisis económica de 2008, aumenta la inquietud acerca del futuro, especialmente en las economías avanzadas. Mi colega de la Northwestern University, Robert J. Gordon, refleja la sensación de muchos economistas al argumentar en su último libro El ascenso y caída del crecimiento americano que no es posible equiparar las enormes innovaciones de mejora de la productividad surgidas en el último siglo y medio. De ser así, las economías avanzadas deberían prepararse para un crecimiento lento y un estancamiento en los próximos años. Pero, ¿es realmente tan sombrío el futuro?
CHICAGO – En momentos que la economía global todavía se debe recuperar de la crisis económica de 2008, aumenta la inquietud acerca del futuro, especialmente en las economías avanzadas. Mi colega de la Northwestern University, Robert J. Gordon, refleja la sensación de muchos economistas al argumentar en su último libro El ascenso y caída del crecimiento americano que no es posible equiparar las enormes innovaciones de mejora de la productividad surgidas en el último siglo y medio. De ser así, las economías avanzadas deberían prepararse para un crecimiento lento y un estancamiento en los próximos años. Pero, ¿es realmente tan sombrío el futuro?