MILÁN – Hace unos años, tuve el privilegio de presidir una comisión sobre el crecimiento en los países en desarrollo. Sus integrantes tenían considerable experiencia en cuestiones de gestión económica, política y social en el contexto de aquellos países, y a pesar de sus diferencias, todos coincidían en algunos puntos esenciales. Hay dos que todavía se destacan en mi memoria.
MILÁN – Hace unos años, tuve el privilegio de presidir una comisión sobre el crecimiento en los países en desarrollo. Sus integrantes tenían considerable experiencia en cuestiones de gestión económica, política y social en el contexto de aquellos países, y a pesar de sus diferencias, todos coincidían en algunos puntos esenciales. Hay dos que todavía se destacan en mi memoria.