CAMBRIDGE – La batalla para reemplazar al actual presidente de la Reserva Federal estadounidense, Ben Bernanke, ha comenzado. Podría esperarse que la presidencia de la Fed –posiblemente el segundo cargo con más poder en Estados Unidos y ciertamente el puesto financiero más poderoso del mundo– sería determinado por un cónclave de funcionarios de bancos centrales. De hecho, la elección está en gran medida en manos del presidente de EE. UU. Consideremos entonces a dos de los candidatos principales, Lawrence Summers, un exsecretario del Tesoro estadounidense, y la actual vicepresidente de la Fed, Janet Yellen.
CAMBRIDGE – La batalla para reemplazar al actual presidente de la Reserva Federal estadounidense, Ben Bernanke, ha comenzado. Podría esperarse que la presidencia de la Fed –posiblemente el segundo cargo con más poder en Estados Unidos y ciertamente el puesto financiero más poderoso del mundo– sería determinado por un cónclave de funcionarios de bancos centrales. De hecho, la elección está en gran medida en manos del presidente de EE. UU. Consideremos entonces a dos de los candidatos principales, Lawrence Summers, un exsecretario del Tesoro estadounidense, y la actual vicepresidente de la Fed, Janet Yellen.