TURÍN – El creciente uso de sofisticadas técnicas de vigilancia, entre ellas el monitoreo digital, dificulta a los disidentes en los estados autoritarios evadir el radar de las autoridades. Miles de agentes secretos de la policía en Bielorrusia, China, Rusia y muchos otros países observan, escuchan y siguen a opositores al régimen y sospechosos de serlo. Según una estimación, en 2019 un 39% de los gobiernos vigilaron a sus ciudadanos en violación total o parcial de sus derechos a la privacidad,
TURÍN – El creciente uso de sofisticadas técnicas de vigilancia, entre ellas el monitoreo digital, dificulta a los disidentes en los estados autoritarios evadir el radar de las autoridades. Miles de agentes secretos de la policía en Bielorrusia, China, Rusia y muchos otros países observan, escuchan y siguen a opositores al régimen y sospechosos de serlo. Según una estimación, en 2019 un 39% de los gobiernos vigilaron a sus ciudadanos en violación total o parcial de sus derechos a la privacidad,