RÍO DE JANEIRO – La resiliencia demostrada por América Latina después de la crisis financiera de 2008 es digna de destacar, especialmente si se la compara con el desempeño de la región en los ochenta y los noventa. Pero ahora que la economía mundial se enfrenta otra vez a la incertidumbre, la región debe encontrar nuevas estrategias para reducir los efectos que puedan derivarse de la volatilidad de los mercados financieros y de un estancamiento prolongado en las economías más ricas del mundo.
RÍO DE JANEIRO – La resiliencia demostrada por América Latina después de la crisis financiera de 2008 es digna de destacar, especialmente si se la compara con el desempeño de la región en los ochenta y los noventa. Pero ahora que la economía mundial se enfrenta otra vez a la incertidumbre, la región debe encontrar nuevas estrategias para reducir los efectos que puedan derivarse de la volatilidad de los mercados financieros y de un estancamiento prolongado en las economías más ricas del mundo.