CHICAGO – En tanto las economías occidentales van saliendo de la crisis del COVID-19, los bancos y los gobiernos enfrentan un nuevo problema: cómo lidiar con los muertos vivientes corporativos. Pero un plan innovador centrado en los trabajadores podría ofrecer una posible solución.
CHICAGO – En tanto las economías occidentales van saliendo de la crisis del COVID-19, los bancos y los gobiernos enfrentan un nuevo problema: cómo lidiar con los muertos vivientes corporativos. Pero un plan innovador centrado en los trabajadores podría ofrecer una posible solución.