Dos iniciativas muy diferentes de "creación de naciones" están acaparando la atención mundial: la lucha de EEUU por dar a luz una política viable en Irak, y el ambicioso proyecto de hacer de Europa una verdadera "Unión". Si bien muchos de los problemas relacionados con estos asuntos son distintos, en ambos emprendimientos se observa un gran "déficit democrático". ¿Por qué ocurre, y qué será necesario para superarlo?
Dos iniciativas muy diferentes de "creación de naciones" están acaparando la atención mundial: la lucha de EEUU por dar a luz una política viable en Irak, y el ambicioso proyecto de hacer de Europa una verdadera "Unión". Si bien muchos de los problemas relacionados con estos asuntos son distintos, en ambos emprendimientos se observa un gran "déficit democrático". ¿Por qué ocurre, y qué será necesario para superarlo?