MILÁN – Cada vez más la juventud europea está empezando a pensar igual que el personaje de Paul Nizan, Antoine Bloyé, que decía: “cuando tenía veinte años no habría dicho que esa era la mejor etapa de mi vida.” La crisis financiera global los ha golpeado fuertemente. La lenta recuperación de la recesión podría ser peor. Los jóvenes que entraron al mercado laboral por la puerta trasera de los contratos temporales son los primeros en ser despedidos cuando expiran sus contratos.
MILÁN – Cada vez más la juventud europea está empezando a pensar igual que el personaje de Paul Nizan, Antoine Bloyé, que decía: “cuando tenía veinte años no habría dicho que esa era la mejor etapa de mi vida.” La crisis financiera global los ha golpeado fuertemente. La lenta recuperación de la recesión podría ser peor. Los jóvenes que entraron al mercado laboral por la puerta trasera de los contratos temporales son los primeros en ser despedidos cuando expiran sus contratos.