ISLAMABAD – La decisión de Arabia Saudita de permitir el ingreso de mujeres a las fuerzas armadas (parte de su programa de reforma económica Visión 2030) fue celebrada en todo el mundo como un avance hacia la igualdad de género, en un país notoriamente desigual. Pero cuando empiecen a enrolarse mujeres, la batalla por la verdadera igualdad dentro de las fuerzas armadas apenas habrá comenzado.
ISLAMABAD – La decisión de Arabia Saudita de permitir el ingreso de mujeres a las fuerzas armadas (parte de su programa de reforma económica Visión 2030) fue celebrada en todo el mundo como un avance hacia la igualdad de género, en un país notoriamente desigual. Pero cuando empiecen a enrolarse mujeres, la batalla por la verdadera igualdad dentro de las fuerzas armadas apenas habrá comenzado.