ATLANTA – Mientras gran parte del mundo se afana en desmantelar monumentos a opresores, los rusos van en la dirección opuesta y erigen estatuas a señores de la guerra medievales, famosos por su despotismo. Comprender este renacimiento puede echar luz sobre el rumbo de la política rusa.
ATLANTA – Mientras gran parte del mundo se afana en desmantelar monumentos a opresores, los rusos van en la dirección opuesta y erigen estatuas a señores de la guerra medievales, famosos por su despotismo. Comprender este renacimiento puede echar luz sobre el rumbo de la política rusa.