MÚNICH – Mientras el mundo se preocupa por Donald Trump, el Brexit y el flujo de refugiados de Siria y otros países en guerra, el Banco Central Europeo sigue trabajando sin pausa y discretamente en su plan de reestructuración de deudas (también llamada flexibilización cuantitativa, FC) para aliviar la carga de los países de la eurozona sobreendeudados.
MÚNICH – Mientras el mundo se preocupa por Donald Trump, el Brexit y el flujo de refugiados de Siria y otros países en guerra, el Banco Central Europeo sigue trabajando sin pausa y discretamente en su plan de reestructuración de deudas (también llamada flexibilización cuantitativa, FC) para aliviar la carga de los países de la eurozona sobreendeudados.