SAN FRANCISCO – Incluso cuando toda la humanidad se moviliza contra la COVID-19, se está empezando a pensar en los cambios que habrá en el mundo después de la crisis. Mientras las empresas se apuran para adaptarse al nuevo mundo del distanciamiento social, la pandemia ha acelerado una tendencia ya inexorable hacia el comercio digital. Este desplazamiento más amplio también podría incluir la adopción generalizada de las monedas digitales, que ofrecen una mayor protección financiera y de la privacidad a los consumidores.
SAN FRANCISCO – Incluso cuando toda la humanidad se moviliza contra la COVID-19, se está empezando a pensar en los cambios que habrá en el mundo después de la crisis. Mientras las empresas se apuran para adaptarse al nuevo mundo del distanciamiento social, la pandemia ha acelerado una tendencia ya inexorable hacia el comercio digital. Este desplazamiento más amplio también podría incluir la adopción generalizada de las monedas digitales, que ofrecen una mayor protección financiera y de la privacidad a los consumidores.